¿Qué chimenea me conviene?
Dependiendo de la utilidad que le queramos dar , tenemos que centrar nuestra elección en tres preferencias:
Por simple placer del fuego, como sistema de calefacción complementario o estética y lujo.
Nada aporta más calidez a una estancia que un buen fuego. Más allá de su estética y de la manera de integrarlo en el ambiente, conviene tener en cuenta cuestiones prácticas, como el rendimiento calorífico de la chimenea sus requisitos de instalación , el tipo de combustible o la facilidad de uso, limpieza y mantenimiento.